Semana Santa 2012: de vuelta a Valladolid y fin de la historia (7 y 8 de abril)

Después de 6 horas en el ferry, llegamos de noche a Barcelona. Directamente cogimos carretera, hacia Tarragona para no hacer el mismo trayecto que a la ida. Tras un intento de furgoperfecto en Vilanova i la Geltrú, nos rajamos y fuimos al camping Platja Vilanova. Dormimos tranquilos, duchita caliente a la mañana siguiente y nos fuimos a Tarragona. Allí dimos un paseo y disfrutamos de tapas "típicas" del lugar: bravas y tosta de butifarra en la plaça de la font, que hacía un día estupendo.

"El gran circo romano"

Tras reponer fuerzas, seguimos el viaje por la nacional 211, cruzando la provincia de Teruel, casi solos por la carretera. Se acercaba la hora del café (nosotros no perdonamos una...) y paramos en Alcañiz, que tenía a los vecinos, turistas y sobre todo tambores preparados para la procesion de la tarde.

Preciosa y singular plaza de España

Atuendo de los tamborileros

Unos kilómetros más y se hizo de noche. Qué casualidad que estabamos llegando a Sigüenza. Allí nos buscamos un furgoperfecto muy cerquita de la plaza mayor para pasar la noche.

La Plaza Mayor cuando llegamos

El furgoperfecto al despertarnos. Al fondo, la Catedral

A la mañana siguiente (domingo ya!) nos dimos un paseo por el pueblo visitando la catedral, el parador, la casa del Doncel, pero, sobre todo, disfrutando de sus callejuelas.

Con pocas ganas de volver a casa, nos despedimos de Sigüenza. Para alargar un poco el viaje, de nuevo parada técnica, en la villa de Ayllón, ya en la provincia de Segovia.

Iglesia románica de San Miguel

A las 6 de la tarde, llegabamos a Pucela y empezaba la odisea de deshacer y repartir equipajes...

Semana Santa 2012: ya en Menorca (2 al 6 de abril) - 2ª parte

Seguimos de paseo por Menorca...

- Turismo urbano: Merece la pena visitar las dos ciudades más importantes, Mahón y Ciudadela.
En Mahón lo que más nos gustó fue la Mola, una fortaleza militar construida durante el reinado de Isabel II. Impresiona la construcción en sí, las vistas que desde allí hay y el uso que tuvo durante la guerra civil como cárcel militar.

El cañón tampoco pasa desapercibido

De Ciudadela yo destacaría, además de que es una ciudad muy bonita y cuidada,  el "ambiente" y la tranquilidad que hay por sus calles, se nota que es gente de allí, que pasean, se saludan y se sientan en las terrazas. Que disfrutan de la vida y que los guiris no han invadido todos los rincones.

Algo diferente es el pueblo de Binibeca Vell, que parece una antigua aldea de pescadores pero que en realidad se hizo en los 70 y para turistas. También merece una visita y perderse entre sus callejuelas llenas de silencio.

- "Montañitas": Monte de Santa Águeda y Monte Toro. En el de Santa Águeda (264 m), tras unos 20 minutos de caminata por una senda empedrada, se llega a las ruinas de un castillo árabe. Las vistas son espectaculares, pero en eso gana el monte Toro, 358 m, la mayor altura de la isla y visible desde cualquier punto de Menorca. Arriba hay un santuario y un Cristo de estos que dan ganas de hacerse una foto...

Subida a Sta Águeda

Vistas desde Toro

hay fotos que no se pueden evitar...

Alguna cosilla más nos dio tiempo a ver pero tampoco es plan de desvelar todos los secretos!

Tras cuatro días agotadores pero también reconfortantes, nos fuimos de Menorca... esta vez con el mar un poco más movidito.

Semana Santa 2012: ya en Menorca (2 al 6 abril) - 1ª parte

Menorca nos recibió un poco nubladilla y con el mar en calma. Muertos de sueño al principio, enseguida nos animamos al ver cuantas cosas nos ofrecía esta pequeña isla. Para no hacer una entrada demasiado larga (que lo va a ser), ahí va un resumen de los encantos de Menorca

- Playas: es lo típico, vas de vacaciones a Menorca para estar en la playa, pero son tantas y tan bonitas, que al final íbamos de un lado a otro buscandolas sólo para verlas, casi sin tiempo para tumbarse en la arena o darse un baño. En general son de difícil acceso y, o bien hay que meter el coche por caminos de cabras o hay que ir andando un rato, o ambas cosas. Pero merece la pena porque al llegar encuentras arenas blancas y aguas de un azul increible. También hay zonas "aptas para familias con niños", como serían Santa Galdana y las playas de Son Bou, Sant Tomás y Adeodato, y sin perder la belleza de otras playas más escondidas.

Cala Mitjana

Cala en Forcat

Cala en Turqueta

Santa Galdana

Cala Macarella

Sant Tomás y  San Adeodato

- Cultura Talayótica:  Hay muchos, y muy bien conservados, restos de poblados del pueblo talayótico repartidos por toda la isla. Nosotros visitamos el de Son Catlar (que encontramos de casualidad cuando andábamos perdidos por los caminos-carreteras menorquines) y algunas construcciones más que iban apareciendo por el camino. En esta web se puede encontrar toda la información y fotos de la mayoría de los monumentos.

Puerta de Son Catlar

Taula de Binissafullet

- Camí de Cavalls: es un camino que recorre todo el perímetro de la isla, su origen se remonta al siglo XVIII, según he podido leer. Es una ruta variada, habiendo tramos asfaltados, pistas de tierra más anchas o más estrechas y otros que realmente sólo pueden hacerse a caballo o andando.

http://www.lamoncloa.gob.es/ServiciosdePrensa/NotasPrensa/MAPYA/_2009/ntpr20090211_Cami.htm

Nosotros nos atrevimos e hicimos un trozo en bici, desde Son Bou a la Playa de Sant Tomás. Las vistas son increibles, aunque yo iba más pendiente de no romperme los dientes con tanta piedrecita...

- Alojamiento: Para la primera noche elegimos un furgoperfecto: el parking de cala Mitjana.La calma absoluta y despertar a lado de una playa paradisiaca no tienen precio. Aunque fuera de temporada en Menorca cualquier aparcamiento podría ser un furgoperfecto, para el resto de noches nos fuimos a un camping, el de Son Bou. Los servicios inmejorables, incluso tenían la piscina ya abierta, y queda bastante bien situado para hacer excursiones por la isla. Las parcelas son enoooormes y tienen incluso demasiada sombra!

Furgoperfecto de Cala Mitjana

Camping Son Bou

Nos dio tiempo a conocer otros muchos lugares: Cap de Cavallería, el pueblo de Fornells, Binibeca,  el monte de Santa Águeda, el monte Toro (la mayor altura de Menorca y visible desde cualquier lugar), Mahón, Ciudadela... Demasiados sitios para una sola entrada.

Semana Santa 2012: viaje de Valladolid a Barcelona (31 de marzo y 1 de abril)

Guillermo siempre dice que las vacaciones empiezan en el momento en el que se sale de casa, así que decidimos tomarnos el viaje a Barcelona, donde cogíamos el ferry, con mucha tranquilidad y hacer un poco de turismo por el camino.

Sin mucho madrugar nos plantamos en Soria el sábado al mediodía a la hora de vermú. Tras un breve paseo de reconocimiento, llegamos a la plaza del Tubo, que estaba bastante ambientadilla. Nosotros nos integramos perfectamente.

Después, para bajar las tapillas, visitamos los claustros de la Concatedral y el de San Juan de Duero,

fuimos por el paseo al lado del Duero hasta San Saturio, 

y como ya se estaba haciendo tarde, tiramos millas hasta el camping municipal de Zaragoza. No eran horas para hacer turismo, así que nos quedamos descansando el cuerpo y dándole un poco a la mente...

A la mañana siguiente, vimos el camping en todo su esplendor: las parcelas son amplísimas, y las instalaciones perfectas: baños limpios y con calefacción, fregaderos con agua caliente, piscina (aunque no estaba abierta), parque infantil y castillo hinchable para niños, wifi... Un poco alejado del centro, por lo que hay que usar el bus o el coche, pero hay quien tiene truquitos para poder aparcar bien en la ciudad.

En Zaragoza nos hizo un día estupendo y pudimos disfrutar de estas vistas del Pilar y del río.

Y de nuevo, carretera y manta. En esta ocasión tocaba atravesar el desierto de Monegros y nos encontramos con una estampa típica de las carreteras españolas:

Unas horitas más de furgo, y ya estábamos delante del ferry.

Y poco después, ya le decíamos adiós a Barcelona...